🌳 1. El bosque de Rambouillet (Île-de-France)
Situado a menos de una hora de París, el bosque de Rambouillet es uno de los macizos más bellos de Île-de-France. En otoño, sus robles centenarios, hayas y castaños se tiñen de colores cálidos, ofreciendo un contraste sorprendente con los estanques y claros. También es un lugar rico en fauna: a veces se pueden ver jabalíes, corzos y ciervos. Es la época ideal para observar la berrea, escuchar el susurro de la naturaleza y desconectar del ajetreo urbano. Para disfrutar plenamente de este entorno encantador, el Camping Huttopia Rambouillet, situado en las inmediaciones, ofrece tiendas equipadas y chalés en plena naturaleza, con un spa forestal perfecto para entrar en calor después de una larga caminata.
🌲 2. El bosque de los Vosgos (Gran Este)
Los Vosgos ofrecen paisajes espectaculares en otoño: abetos oscuros, hayas resplandecientes, cascadas y lagos glaciares componen un decorado de cuento de hadas. El aire es fresco, la niebla envuelve los valles por la mañana temprano y las vistas panorámicas de la Route des Crêtes son increíblemente coloridas. Para alojarse en las cercanías, el Camping Le Haut des Bluches, situado en La Bresse, ofrece parcelas en terrazas sombreadas, cómodos chalés de madera y habitaciones de hotel. El complejo también ofrece acceso directo a las rutas de senderismo de , a las pistas ciclables y a las estaciones de esquí cercanas, a la vez que se encuentra a 710 metros de altitud, al borde del bosque y del río.
🍂 3. El bosque de Lanmary (Périgord, Nueva Aquitania)
El bosque estatal de Lanmary es un remanso de paz. En otoño, los caminos se cubren de un manto de hojas rojizas y la niebla matinal envuelve los troncos, creando una atmósfera casi mística. Los amantes de la tranquilidad y el descanso encontrarán aquí su felicidad, y la región también ofrece deliciosas setas y castañas de temporada. Para una estancia en plena naturaleza, el Camping Le Grand Dague, situado a pocos minutos del bosque, ofrece amplias parcelas, cómodos chalés y mobil-homes, perfectos para disfrutar de la tranquilidad del Périgord con todas las comodidades a mano.
🦌 4. El bosque de las Landas (Nueva Aquitania)
El vasto bosque de las Landas, plantado de pinos marítimos, se convierte en otoño en el escenario de un espectáculo impresionante: la berrea del ciervo. Los senderos forestales invitan a practicar senderismo o ciclismo, entre aromas de resina y luz dorada. A pocos minutos, el camping Les Prés Verts en Gastes ofrece cabañas y bungalós enclavados entre pinos, lo que permite prolongar la experiencia otoñal y escuchar el bramido de los ciervos al atardecer.
🍇 5. El Parque Nacional de los Bosques (Haute-Marne / Côte-d'Or)
Este parque nacional poco conocido es un auténtico santuario en otoño, con sus robles, hayas y arces que se visten de colores llamativos. Aquí, la naturaleza está intacta y la fauna es discreta: corzos, zorros y búhos pueblan el sotobosque. Para disfrutar de este entorno excepcional mientras se aloja en un camping, el Camping de la Liez, situado en Peigney, ofrece amplias parcelas, chalés con todas las comodidades y mobil-homes, perfectos para disfrutar de la tranquilidad del parque sin renunciar a todas las comodidades. El camping también ofrece acceso directo al lago de la Liez, ideal para practicar deportes acuáticos y relajarse en plena naturaleza.
Consejos prácticos para acampar en otoño
- Lleve ropa de abrigo en capas, un saco de dormir adecuado y una linterna frontal.
- Anticipa la humedad y, si es necesario, opta por alojamientos cubiertos.
- Disfrute de las actividades de temporada: senderismo, observación de la berrea del ciervo, recolección de setas, fotografía.
- Descubra la gastronomía local: castañas asadas, sopa de calabaza, vinos de temporada, setas frescas.
El otoño es la estación de los colores, la calma y la contemplación. Desde Rambouillet hasta los Vosgos, desde el Périgord hasta las Landas, cada bosque tiene su propio ambiente y encanto. Los campings que aún permanecen abiertos permiten prolongar esta inmersión entre la sencillez, el confort y la naturaleza preservada. Tanto si es aficionado al senderismo, a las experiencias salvajes o a las estancias acogedoras, el otoño es la invitación perfecta para plantar la tienda, dejar las maletas y dejarse seducir por la magia de los bosques. 🍂